Movido por el Espíritu: Hermano Luis Ramos, F.M.S.

(Photo cortesía de Marist Brothers.)

¿Qué fue lo primero que te atrajo de la vida religiosa?

Primero, la idea de la vida religiosa era tan diferente de todo lo que había conocido: vivir juntos, trabajar juntos, orar juntos. Segundo, los valores coincidían totalmente con aquellos con los que crecí. Mi familia iba a iglesias Pentecostales, y apoyaban fuertemente la educación Católica, me mandaban a escuelas Católicas. En la escuela secundaria comencé a sentirme realmente atraído al Catolicismo, e ingresé a RCIA (Rito de Iniciación Cristiana de Adultos) en la universidad. Mi familia me apoyaba totalmente, diciendo “¡El Espíritu Santo opera de muchas formas, no podemos impedirlo!”

¿Cuál es la mayor diversión que has tenido con tu comunidad?

Pasamos mucho tiempo juntos, que puede resultar divertido cuando nos burlamos entre nosotros. Una noche pasamos una hora entera haciendo una lista de las “frases más dichas” de los demás, y algunas impresiones eran realmente atinadas.

¿Tu forma preferida de rezar?

Los Salmos me hablan sobre todo. Me gusta usar uno y encontrar una canción que combine con él. Luego algo de silencio, un momento para agradecer a Dios, y decirle a Dios lo que estoy pensando.

¿Cuál es el santo que más admiras?

Hildegard de Bingen es probablemente mi favorita; ¡no tenía miedo de iniciar cosas nuevas y desafiar al poder!

¿Cuál es tu ministerio actual?

Actualmente trabajo con varios grupos de estudiantes en Marist College (Universidad Marista) en Poughkeepsie, New York. Nuestro noviciado está en ese campus. Parte de mi ministerio es relacionarme directamente con los estudiantes a través de los Ministerios del Campus y estar presente en el campus.

¿Qué es lo que disfrutas de tu trabajo?

Estar presente para escuchar y facilitar es mi parte favorita. Es un honor que te permitan entrar en la vida de cualquier persona, y aprendo de los estudiantes de aquí.

Traducido por Mónica Krebs